“¿Tienes un minuto?”

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Mérida 13/12/2017.- La situación de la mujer con discapacidad intelectual es una prioridad para Plena inclusión Extremadura. Por esa razón, el Programa de Mujer de esta federación realiza una serie de actividades para fomentar su empoderamiento y participación en la toma de decisiones.

Desde el pasado lunes 11 de diciembre, 30 mujeres procedentes de diferentes entidades de toda la región (INCLUDES Almendralejo, Plena inclusión Don Benito, Plena inclusión Xerez, Plena inclusión Mérida, Plena inclusión Montijo, INCLUSIVES, de Villanueva de la Serena; Plena inclusión ASINDI Alcántara; Afadiscop, de Mérida; y AEXPAINBA, de Badajoz) se han reunido en Mérida para compartir unas jornadas de convivencia y trabajo.

El objetivo ha sido fomentar su empoderamiento y participación en la toma de decisiones. Durante dos jornadas han trabajado en cuatro ámbitos que les afecta directamente en su vida diaria: la política, sociedad, economía y cultura.

Como conclusión han elaborado 300 propuestas que presentan a líderes y representantes de la sociedad extremeña. Muchas de las propuestas han llegado a Mérida tras el trabajo previo realizado en los grupos de mujeres que existen en las diferentes entidades de Plena inclusión Extremadura, y están integrados por unas 200 mujeres en toda la región.

En este acto, que ha comenzado con unas breves palabras de bienvenida del Presidente de Plena inclusión Extremadura, Pedro Calderón, ha estado presente la directora del Instituto de la Mujer, Elisa Barrientos. Además, han asistido representantes de los grupos parlamentarios en la Asamblea de Extremadura.

También han acudido de representantes del entorno empresarial y sindicatos de la región.

El ámbito de la cultura cuenta con la presencia de mujeres líderes en las artes escénicas y la gestión cultural. Además, el Tercer Sector en Extremadura y la Universidad también han estado presentes en este encuentro.

El formato de “¿Tienes un minuto?” –compartiendo un café mientras se conversa- fomenta la cercanía y proximidad de las personas, facilitando así la comunicación y la empatía con las personas con discapacidad intelectual. Se persigue de este modo que los líderes y representantes de la región perciban qué necesidades plantean este grupo de mujeres, a través de esas 300 propuestas, para facilitar su inclusión plena en la sociedad.

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